El fin de las desgravaciones y las exigencias del Banco de España llevan a reducir los precios hasta un 60%
Con más de 180.000 millones de euros en activos inmobiliarios problemáticos -es decir, directamente fallidos de clientes o de dudoso cobro-, la banca española mantiene en el ladrillo uno de sus principales problemas, como acaba de atestiguar el último informe de estabilidad financiera del Banco de España. Y ante esa situación, las principales firmas del sector han lanzado en las últimas semanas una batería de propuestas muy agresivas para tratar de liberarse de ese negocio. «Los bancos no somos inmobiliarias, pero cada vez nos toca vender más pisos», apuntaba con sorna hace dos semanas un dirigente bancario.
Entre las últimas decisiones está la adoptada por el Banco Santander, que regala el IVA o un año de hipoteca gratis, o de La Caixa o la caja alicantina CAM, con descuentos de hasta el 60% en algunos de sus principales inmuebles.
Promociones permanentes
Otras cajas, las que tienen más ladrillo encima, mantienen desde inicios de año promociones permanentes con un 30% de rebaja o financiación por el 100% de la vivienda, posibilitando también financiar los gastos del préstamo. BBVA o Caixa Galicia están entre estos últimos. Es decir, condiciones imposibles a inicios de año, pero que sí se daban en los años del bum inmobiliario.
¿A qué obedecen esas nuevas políticas de venta? Hay varios motivos. El primero está en la nueva política de provisiones que aprobó antes de verano el Banco de España. El gobernador de la institución supervisora, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, aprieta para que las entidades se desprendan de ese lastre y saneen sus cuentas. Y por ello ha aprobado unas medidas que penalizan en la cuenta de resultados el mantenimiento de activos inmobiliarios (desde fincas a pisos, promociones a medias...).
Menos valor y más provisión
La circular del supervisor supone rebajar la tasación de los inmuebles -se han depreciado, según el supervisor- y obliga a cubrir el 100% de su valor en apenas un año; hace apenas dos meses permitía hacerlo hasta en tres años. De esta forma, la entidad en cuestión tiene que adelantar unos fondos que no estaban previstos a inicios de año para cubrir todos esos inmuebles que mantiene en su balance.
A esa exigencia propia del sector se suma que en apenas dos meses, el próximo 1 de enero, desaparecerán las deducciones por compra de vivienda para aquellas rentas por encima de los 24.107 euros, lo que previsiblemente detraerá de comprar una casa porque tendrá menores atractivos fiscales. Prueba de que los bancos tienen muy presente esa deducción son las ofertas de la CAM y del Santander, que expiran el 31 de diciembre.
Más de 20.000 pisos en venta
Hay mucho de lo que desprenderse: solo las cinco primeras cajas y los cinco mayores bancos tienen en sus divisiones inmobiliarias más de 20.000 pisos a la venta, viviendas repartidas por toda España, aunque la mayoría se concentran en la costa del Mediterráneo y en Madrid. Las bolsas más abultadas son las que presentan Catalunya Caixa (más de 3.000) y la propia CAM (otras 6.000). Y en esa relación faltan algunas pequeñas firmas que sucumbieron al tirón constructor. Está por ver si ese volumen crea una nueva burbuja, aunque sea temporal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario