El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero ha confirmado por fin una profunda remodelación del Gobierno con la que se especulaba desde hace meses y que afecta a varias carteras ministeriales. Rubalcaba, ahora vicepresidente primero además de ministro de Interior, será el principal baluarte de una nueva etapa en la que el jefe del Ejecutivo confía en recuperar la confianza de su electorado perdida tras el descrédito sufrido con la batería de recortes emprendida por su gabinete.
Hoy no sólo se ha dado a conocer el nombre del nuevo ministro de Trabajo: Zapatero ha concluido una amplia remodelación de Gobierno con la que se venía especulando hace meses y que afecta a varias carteras ministeriales. En él incluye a Alfredo Pérez Rubalcaba como vicepresidente primero en sustitución de María Teresa Fernández de la Vega. Las carteras de Sanidad y Política Social, Exteriores, Presidencia y Medio Ambiente también experimentan cambios al más alto nivel, así como Vivienda, que se integra en Fomento, mientras que Igualdad desaparece y sus competencias pasan a Sanidad.
El principal cambio de gabinete anunciado hoy por sorpresa afectará a la Vicepresidencia Primera del Gobierno, que ocupa María Teresa Fernández de la Vega, y que pasa a manos de Alfredo Pérez Rubalcaba, que además conserva la cartera de Interior, según ha confirmado el propio presidente del Gobierno en rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa tras comunicar las novedades al Rey.
"He decidido hacer una importante remodelación del Gobierno. Hace falta en este momento un Gobierno renovado y políticamente reforzado", ha insistido Zapatero, que se ha referido a los nuevos miembros de su gabinete como "personas con un perfil político muy claro con experiencia de gestión y capacidad de comunicación para explicar a la sociedad española lo que estamos haciendo".
El jefe del Ejecutivo ha subrayado su agradecimiento a la vicepresidenta primera saliente "por su dedicación, su enorme esfuerzo y su coraje y la voluntad que ha demostrado en estos seis años", que "no se puede expresar sólo con palabras". El presidente ha anunciado que la propondrá como vocal del Consejo de Estado, para lo que antes tendría que abandonar su escaño en el Congreso.
El jefe del Ejecutivo ya había avanzado el pasado domingo que hoy daría a conocer el nombre del sucesor del hasta ahora responsable de la cartera de Trabajo, Celestino Corbacho, inmediatamente después del debate parlamentario de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Éste será, finalmente, el que fuera secretario general de Empleo entre 2004 y 2006, Valeriano Gómez.
Ramón Jáuregui queda como ministro de Presidencia, mientras que Trinidad Jiménez, que recientemente ha perdido las primarias ante Tomás Gómez por la candidatura socialista a la Comunidad de Madrid, pasaría a la cartera de Exteriores en sustitución de Moratinos. Por su parte, Leire Pajín, secretaria de Organización del PSOE y número tres del partido, será la nueva ministra de Sanidad y Política Social.
Marcelino Iglesias será el encargado de sustituirla al frente de la ejecutiva del PSOE como nuevo secretario de organización, ha anunciado Zapatero, algo que propondrá al Comité Federal el próximo sábado. Al abrigo de Sanidad quedan también las competencias del Ministerio de Igualdad, el cual se suprime en la nueva remodelación del Gabinete. Su responsable, la saliente ministra Bibiana Aído, será designada secretaria de Estado de Igualdad en el departamento que dirigirá Leire Pajín.
El Ministerio de Vivienda también desaparecerá para integrarse en el de Fomento y desaparecerá la cartera dirigida hasta ahora por Beatriz Corredor, que pasará a ser asumida por el ministro de Fomento, José Blanco. La hasta ahora ministra de Vivienda ocupará la Secretaría de Estado de Vivienda en este departamento. Por su parte, la consejera de Obras Públicas y Vivienda de la Junta de Andalucía, Rosa Aguilar, será la nueva ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM) y será relevada en su cargo en la Junta por Josefina Cruz.
La última de las novedades filtradas a los medios a lo largo de toda la mañana ha sido el anuncio de que las competencias de Función Pública ya no dependerán de Presidencia y vuelven al antiguo Ministerio de Administraciones Públicas, reconvertido a Política Territorial ahora bajo el mando de Manuel Chaves.
Zapatero ha defendido el nombramiento de un nuevo Ejecutivo "de gran fortaleza política para completar una tarea de envergadura" y ha asegurado que el nuevo Gabinete será "el Gobierno de las reformas y el de la recuperación definitiva y la creación de empleo (...). La opinión pública y nuestro electorado venían reclamando cierta iniciativa política". El Presidente también ha hecho alusión a la desaparición de los dos ministerios como "algo que responde a la propia voluntad política del Congreso de los Diputados".
Una de las que quedan reforzadas en su gestión ha sido vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, precisamente la responsable de dar la cara ante las reformas económicas que han desprestigiado la imagen de Zapatero. Tras la salida hoy de Moratinos y De la Vega, Salgado es la única que permanece al frente de un Ministerio desde que el PSOE accediera al poder en 2004, después de haber pasado por las carteras de Sanidad, Administraciones Públicas y desde 2009, Economía.
"Los hechos así lo demuestran", ha respondido a los medios en los pasillos del Congreso de los Diputados por la estima que le tiene Zapatero al mantenerla en su Ejecutivo a pesar de todas las crisis de Gobierno que ha afrontado en sus dos legislaturas.
Los ministros y exministros eluden pronunciarse y Garmedia y Chaves se enteran "por los medios"
La hasta ahora ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, que ha acudido al Congreso donde hoy se aprueba la nueva ley contra el tabaco, eludió hablar sobre su nombramiento como responsable de la cartera de Exteriores antes de que Zapatero confirmara oficialmente los cambios. El resto de ministros, que fueron interrogados a la entrada del Pleno, tampoco quisieron pronunciarse al respecto, excepto el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, que resaltó que su sucesor es una "excelente persona" y un "buen amigo".
María Teresa Fernández de la Vega también declinó hacer comentario alguno sobre su salida del equipo de Zapatero, aunque aseguró que se encuentra "fenomenal", informa Efe. Minutos antes, dentro del hemiciclo y después de votar lasenmiendas a la totalidad de los Presupuestos de 2011, la ministra de Economía, Elena Salgado, se fundió en un emotivo abrazo con De la Vega, en un gesto de "cariño". Mientras, la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, y el vicepresidente tercero y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, que asume las competencias de Función Pública, dijeron haberse enterado de los cambios "por los medios".
Barreda da su bendición
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, quien hace dos semanas reclamó públicamente a Zapatero una remodelación de gobierno, se ha mostrado "encantado" con los cambios, informa Servimedia. "Es un cambio de rumbo en la buena dirección", razón por la que "estoy encantado (...). Me parece estupendo que el presidente se haya decidido a dar una "señal inequívocamente clara de que va a en serio (...). "Es una reforma del Gobierno con profundidad que muchos estábamos esperando y deseando".
Respecto a la situación en que queda Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo: "Tengo de Alfredo la mejor de las opiniones. Me parece que es una persona muy inteligente, muy bien preparada y que comunica muy bien, y con larga y buena experiencia política". En términos similares se refirió al presidente aragonés, Marcelino Iglesias.
Fin a las especulaciones sobre la cartera de Trabajo
El nombre del nuevo ministro de Trabajo pone fin a las especulaciones de las últimas semanas sobre quién será el sustituto de Celestino Corbacho, que abandona el Gobierno de España para volver a la política catalana. Zapatero dijo además que el elegido ya intuía que iba a ocupar la cartera de Trabajo, pero no dio más detalles, aunque apuntó que esperaba de él una ambición "renovadora" para mejorar los servicios públicos de empleo.
Desde que se conoció que Corbacho iba a integrarse en las listas del PSC a las elecciones catalanas, muchos han sido los nombres que se han barajado para tomar los mandos del Ministerio. Desde Valeriano Gómez, antiguo secretario general de Empleo, hasta Manuel Chaves, vicepresidente tercero del Gobierno y ministro de Política Territorial, pasando por el actual secretario de Estado de la Seguridad Social y secretario de Economía del PSOE, Octavio Granado, e incluso por los eurodiputados socialistas Alejandro Cercas y Ramón Jáuregui, y el secretario de Estado de Cooperación Territorial en el Ministerio de Política Territorial, Gaspar Zarrías.
1 comentario:
Estos quieren hacer caja y si no que se lo pregunten a Rubalcaba que si te descuidas te la clava.
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