Artur Mas promete "lealtad a la Constitución, al Rey y al Estatuto de Cataluña" que tanto ha criticado
La toma de posesión de Artur Mas, presidente de la Generalitat en esta nueva legislatura, era un acto que conciliaba más intereses que el habitual dado el 'jaque' que hay en el ambiente por el independentismo expreso que defiende CiU.
¿JURAR LEALTAD A LA CONSTITUCIÓN?
El hecho de que el juramento como presidente de la Generalitat incluya la lealtad a la Constitución del conjunto de España abría ya la primera polémica a si Mas respetaría el protocolo o alteraría de alguna manera el juramento para no irritar a los sectores independentistas cuyo apoyo ha buscado en estos últimos comicios desesperadamente.
El acto, presidido por la presidenta del Parlament, Nuria de Gisbert, de Unió, que representa el sector menos partidario a la independencia - aunque en una entrevista realizada el 23 de diciembre se mostraba dispuesta a cambiar su criterio contrario a la independencia si la situación no cambiaba, se desarrolló de la siguiente manera:
De Gisbert- "Promete por su conciencia y por su honor cumplir fielmente las obligaciones del cargo de presidente de la Generalitat de Cataluña, con fidelidad al Rey, a la Constitución, al Estatuto de Autonomía y las instituciones nacionales de Cataluña".
Artur Mas- "Sí, lo prometo, y plena fidelidad al pueblo de Cataluña"
Es decir, Mas prometió sin problemas lealtad a la Constitución Española, al Estatuto de Autonomía - que ahora parece querer destruir - y al jefe del Estado español, y añadió como única coletilla para que sus fans se quedaran satisfechos, la referencia a esa fidelidad al pueblo de Cataluña. Un posible argumento para incumplir todo lo prometido anterior si contradice a eso último.
Abucheos al PP y aplauso de Montoro
Los representantes del Partido Popular en el acto, encabezados por Alicia Sánchez-Camacho, presidenta del PP y el ministro Cristobal Montoro, fueron recibidos con abucheos, gritos y silbidos, lo que contrastó con los aplausos con los que eran recibidos otros políticos. En la comitiva pepera también estuvieron recibiendo abucheos Enric Millo y la delegada del Gobierno María de los Llanos de Luna.
A pesar de ello, Cristobal Montoro aplaudió el discurso de Artur Mas.
Plantón de Ciutadans
Quienes optaron por ahorrarse los abucheos de los independentistas fueron los representantes de Ciutadans, que en esta legislatura forma grupio propio. El presidente de esa formación, Albert Rivera, explicó que "aunque nosotros defendemos el autogobierno de Catalunya y la Generalitat como institución, no podemos apoyar a un presidente autonómico que no respeta la pluralidad de Cataluña".
No es la primera vez que hay polémica en una toma de posesión de un presidente de la Generalitat. Hay que remontarse a la Transición, en 1980, cuando el histórico presidente de la Generalitat, Josep Tarradellas amenazó con plantarse si en el acto de nombramiento del nuevo presidente Jordi Pujol, no se invitaba al mismo al Rey de España o al presidente del Gobierno, D. Adolfo Suárez.
También en otras comunidades hubo polémicas, en 1988 el representante del Gobierno en la toma de posesión del presidente de Canarias, el ministro Joaquín Almunia, rechazó asistir al acto por discrepancias protocolarias con el nuevo presidente Fernando Fernández.
1 comentario:
Este lo que es, un traidor a España y todo lo que sea secundar los consejos del rey es una pérdida de tiempo, por lo tanto lo que no hay que permitir bajo ningún concepto por inconstitucional, es permitir ningún tipo de consultas separatistas.
Publicar un comentario